En 1817, San Martín y los revolucionarios independentistas habían tomado Santiago; sin embargo, los realistas aún controlaban el sur del país. Durante los siguientes tres años, las fuerzas de San Martín y O ‘Higgin lucharían contra las tropas realistas españolas. Al mismo tiempo, San Martín y O’Higgins comenzaron a adquirir naves en preparación para un ataque naval contra Perú. La necesidad de una flota naval era clara, ya que el primer gobierno independiente en Chile había sido derrocado por una invasión naval que trajo tropas realistas desde Perú. Así, los patriotas construyeron su propia flota naval, tanto para asegurar a Chile, como también en preparación para su propia invasión al Perú. Algunos de la embarcaciones fueron capturadas por los españoles y otras fueron traídass desde Estados Unidos y Gran Bretaña, que también proporcionaron oficiales navales, como el escocés Lord Thomas Alexander Cochrane, quien iba a resultar fundamental para reprimir a los realistas españoles en el sur. Este escuadrón de naves se construyó entre 1817 y 1820. Casi todos los oficiales eran británicos o norteamericanos. En el podcast a continuación, Natalia Sobrevilla Perea nos ilustra sobre la participación de los ingleses en las Guerras de la Independencia.
Una de las estrategias navales empleadas por los patriotas consistía en reducir el comercio peruano y, de esta manera, debilitar su fortaleza económica, al tomar buques mercantes. Los patriotas incentivaron a los marineros al permitirles conservar los barcos y cargamentos que capturaron. Esto mantuvo la moral alta y proporcionó un golpe financiero prolongado al Perú. Este ataque al comercio fue una táctica utilizada frecuentemente por los británicos.
San Martín se convirtió en comandante en jefe del ejército, que continuaría tratar de liberar al Perú. Fue totalmente apoyado por O’Higgins, y en 1820 la flota naval de San Martín zarpó hacia Perú. Lord Cochrane había asaltado una instalación naval española en el sur de Chile, asegurando de esta manera que hubiera poco peligro de que el enemigo atacara desde el sur. Los luchadores por la independencia pudieron tomar Lima, pero la Sierra demostró ser un bastión realista.
Lectura adicional
Rosas, Claudia. El miedo en el Perú. Siglos XVI-XX. Lima: Pontificia Universidad Católica del Perú, Seminario Interdisciplinario de Estudios Andinos, 2005.